domingo, 22 de abril de 2007

Hola, hola para todos, todos!

Hola, hola a todos, soy Kurchatovio, propietario de este blog. Algunos puede que me conozcáis, otros puede que no y, simplemente, hayáis encontrado esto googleando o en alguna de las firmas de uno de los millones de foros en los que estoy suscrito.
He decidido empezar con esta pequeña historia como introducción al significado de este rincón de internet en el que de vez en cuando publicaré alguna historia que se me ocurra, una crítica mía o de otra persona tal vez sobre una película libro, etc. o simplemente cualquier chorrada que se me pueda ocurrir en un momento de desparcimiento cerebral.
Sobra decir que en cuanto podáis, dejéis un comentario (o dos) de cualquier artículo que aquí deje.

Un saludo para todos.

miércoles, 21 de marzo de 2007

El Dragón Color Frambuesa.


Hace mucho, mucho tiempo, en el país de los dragones vivía un dragón muy especial. Este no era verde, como todos los demás, sino que tenía la piel llena de lunares color frambuesa, ya que esta era su fruta preferida. Los demás dragones se burlaban de él por ser diferente, por tener la piel color frambuesa.
En una ocasión, el dragón intentó pintarse con pintura verde para terminar con las burlas, pero al contacto con el agua esta se desvaneció, lo que provocó nuevas y más duras burlas al pobre dragoncito.
Avergonzado y harto, decidió marcharse para siempre del país de los dragones y se dirgió a la ciudad. Parecía que ahora sí podría ser feliz pero no había contado con que los humanos no estaban acostumbrados a estar con los dragones ¡Y se asustaban al verle!
Otra vez triste, salió de la ciudad y se alojó en una granja de las afueras. Los animales, contentos de tener un nuevo inquilino, lo recibieron muy bien, pero el granjero al verlo se enfureció y lo hechó a patadas del lugar.
El dragón empezó a añorar su hogar y decide regresar.
Para su sorpresa, todos lo reciben con cariño y alegría, pues lo habían hechado mucho de menos, a pesar de haberlo hecho sentir muy mal.
El dragón se puso tan contento que compartió sus frambuesas con los demás dragones sin importarle ya lo ocurrido en el pasado.


El Dragón color Frambuesa al fin fue feliz, sintiéndose uno más, compartiendo sus famosas frambuesas.

En realidad todos somos el dragón color frambuesa, todos nos sentimos diferenets a los demás en algún momento de nuestra vida pero, compartiendo nuestras frambuesas, es decir, darnos a conocer, lograremos ser aceptados tal y como somos por los demás.